El email marketing es un vehículo de gran potencia que debemos tener en cuenta a la hora de entrar en contacto con nuestros usuarios para intentar fidelizarlos. Quizás pienses en estos momentos que está obsoleto o, simplemente, que no sirve de mucho. Sin embargo se trata de saber cómo enfocarlo a través de las palabras y la manera de comunicar. Con ello se conseguirá que nuestras campañas de email marketing salten la barrera del temido SPAM. Alcanzando así la conversión de visitas en clientes.
Consejos básicos anti SPAM en el email marketing
A continuación te dejamos algunas reglas básicas a la hora de escoger las palabras y el modo de comunicar tus asuntos. Para evitar ser marcado como SPAM. Toma nota:
Palabras ‘prohibidas’
Gratis, sexo, oferta, regalo, dinero… Debes evitar este tipo de palabras si no quieres hundirte en el buzón de correo no deseado. En este sentido, tienes que tener cuidado con la elección de palabras que vas a utilizar. Además has de tener en cuenta otros aspectos como: no abusar de los signos de exclamación en tus frases, no escribir tus textos en mayúsculas o enviar emails demasiado escuetos.
Los temidos descuentos
Los usuarios están hartos de ver cómo llegan descuentos y más descuentos a sus buzones de entrada. Tanto que han dejado de llamar su atención. Lo cierto es que este recurso es efectivo si escogemos bien las palabras y aportamos un toque de originalidad. Solo de esta manera lograremos captar la curiosidad del receptor. Con el objetivo de conseguir que hagan clic en nuestros mensajes para conocer más a fondo nuestro contenido.
La agresividad se queda en casa
Está claro que a la hora de enviar los mensajes debemos utilizar la denominada call to action. Hablamos de la denominada llamada a la acción para tratar de atraer a posibles clientes. Eso sí, debemos tener cuidado a la hora de utilizar este recurso. Hay que evitar que incite de forma directa a la compra. Dicho de otro modo: en la sugerencia radica lo atractivo y en lo atractivo, la curiosidad.
Personaliza con cautela
Si bien debemos dirigirnos a nuestros suscriptores de la forma más humana posible personalizando los asuntos no debemos abusar en exceso de este medio. Tan malo es escribir como si fueras un robot como abusar de la confianza que te tomas a la hora de dirigirte a alguien. El camino de en medio es el camino justo para no caer en la bandeja de los no deseados.
Archivos adjuntos
Los archivos adjuntos están considerados como riesgos de virus. Así lo entienden los filtros anti SPAM. En su lugar, utiliza enlaces que posibiliten a los lectores su descarga en caso de que estén realmente interesados en el contenido que le estás enviando.
Tamaño y color de la fuente
El modo en que se presentan nuestros mails también influye a la hora de que estos caigan o no en manos de los filtros anti SPAM. Utiliza un tamaño de fuente normal y evita siempre que puedas el color rojo para resaltar tus textos para no ser eliminado antes de llegar al receptor.
Pruebas de SPAM
Ser precavido y hacer tests de SPAM antes de realizar el envío final nos ayudará a detectar posibles errores. No te la juegues y haz tantas pruebas como creas necesarias antes de publicar tus mensajes.
Y ahora llega tu turno… ¿qué otros errores has detectado que hacen inefectivas las newsletters? ¿Cómo desarrollarías el contenido de un buen email marketing?
